Estimados ensañamientos:
Una vez más hemos sido víctimas de la polaridad (doble e inescrutable de lo que consideramos parte superior del planeta e inferior obviando la idea que puedan ser costados) a la que se nos ha expuesto desde la concebida irrespetuosa, imperativa de nuestros progenitores; y vivenciar de igual modo la polaridad, "bi" si quiere redundar, que invisibiliza, homogeiniza y priva al lunar ser blanco, a la materia fecal el ser dinámica y al grano, salir en la cara.
La polaridad politica en nuestro pais, República que mañana sera empresa o sabana, condensa a los buenos hijos de buenos padres y de excelsos y renombrados abuelos en una parcialidad u otra a quienes sostendrán las riendas, nosotros los equinos, de nuestros destinos desde su propia subjetividad histórica.
So pretexto de la democracia dirán hoy que la masticación da proteínas al cuerpo y que el bonsai es objeto del diablo. Tanta afirmación, tanta propulsión de verdades históricas, hacen que, al final, la democracia sea una excusa de la representatividad y la imposición de pareceres.
Familias patricias, pater, macho musculosos, patriarcado; son los lineamientos contemporáneos de nuestro país y de sus núcleos que detentan los calzones y sus individualidades, muy a pesar de éstos.
Los golpes los hacen los mediocres, los astutos prefieren el conformismo social. Así estamos hoy en este egocéntrico (sinónimo de Nación) plagado de binomios ridículos e inconsistentes. Que debaten la presencia y valor del debate, la transpiración equina y el reverberar de las tormentas. Mientras, nosotros, monigotes de ensañamiento, vamos encendiendo las mechas, con el deseo de olvidar y liberarnos de toda institución.
Nos ensañamos?
Ya lo creo.
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